Noticias desde el Valle de Hortunas para las personas que dejé en mi camino hacia el silencio de mi corazón. Personas a quien agradezco las experiencias pasadas vividas. Gracias.
Buenos días,
Hace ya unos cuantos años que inicié una profunda cuarentena para conectar con algo más importante que mi propia existencia. Me despedí de todos vosotros, familia y amigos.
Desde hace unos meses antes que se declarara la pandemia Covid-19, siento la necesidad de “volver” para informar, comunicando noticias desde el Valle de Hortunas que me ha cuidado en el silencio en estos últimos años. Durante mi retiro trascendental voy construyendo con mis manos el Centro AtelTrainer, lugar de formación, tratamientos y sanación ancestral para las personas preparadas para trascender.
Los fines de semana, Massiel y Chantal son las únicas personas en romper mi silencio para ayudarme. Estamos unidos por las esencias más allá de lo entendible. (Video-presentación oficial del Centro)
En 2008, cuando explotó lo que los especialistas llamaban una gran crisis económica y política internacional, sumándose a la voz del cambio climático y preparándonos para la gran crisis energética de 2050, ya hablaba de “guerra de conciencias” y no de crisis. (Video-cambio trascendental)
En mi tercer libro que publiqué en 2016, “Entrenamiento Trascendental” compartí mi sueño y visión de pequeño, anticipando el gran cambio 2021/2022. (Video-mensaje universal)
El coronavirus, junto al cambio climático, y a la incoherencia política y social a nivel planetario, son las consecuencias de una naturaleza enfadada que se está revelando para recobrar el equilibrio perdido entre todos los seres de este maravilloso planeta, donde el ser humano no es más que un invitado que en su caminar egoísta ha generado una realidad superficial que ha aniquilado a los anfitriones que nos cuidan a todos, y son, mares y montañas, bosques y llanuras, ríos y lagos, desde la abeja al lobo de Siberia.
Se ha iniciado el gran cambio planetario y el ser humano tiene que aceptar, volver a su lugar en este planeta, que no es más que cuidar y agradecer a quienes nos cuidan.(Video Coronavirus)
La población humana se reducirá drásticamente y la labor de la medicina moderna ayuda y ayudará aún más para que las personas no sufran en su transición final en esta dimensión, tratando los síntomas y aliviando el dolor.
Van a ser tiempos trascendentales sin vuelta atrás. Muchas pérdidas habrán, pero en 2041, ya no habrá oscuridad en este mundo.
Sufrir es no aceptar e intentar frenar este cambio de conciencia planetaria, aferrándose a un estilo de vida y de pensar que ha llevado este mundo al desequilibrio existencial hacia el fin.
El equilibrio volverá, más allá de la voluntad humana. No solo existe el hombre invitado en este planeta.
Pronto, los que caminaban a contra corriente, muchas veces con desesperación y tristeza por no ser comprendidos, aislados y menospreciados por la masa ignorante, se darán cuenta que caminaban por el buen camino, se descubrirán nadando en paz al ritmo de la existencia.
Cuando terminé de escribir mi cuarto libro “Amor trascendental, sanación ancestral”, y después de haberme sanado de todo desde hace más de 10 años, a finales de octubre 2018 empecé a tener problemas respiratorios propios de una neumonía.
A finales de diciembre 2018, sin entender nada, tuve que ir al hospital, por primera vez desde hace mucho tiempo, por la complicación respiratoria que empeoró drásticamente. Me diagnosticaron una obstrucción respiratoria grave. Cuando la doctora me preguntó, cómo había hecho hasta ahora para aguantar, le contesté . No me contesto y su mirada reflejo sus pensamientos ¡está loco!
No acepté más tratamiento para aliviar los síntomas de mi insuficiencia respiratoria grave, que inhalar un potente corticoide.
Trabajé duro como siempre, pero a un ritmo inferior, haciendo pausas para recuperar mi aliento. Solo tomaba los inhaladores las veces que mi esencia me lo autorizaba (conexión). Meditaba.
Temprano una mañana de un fin de semana de mayo 2019, a mi lado estaba Massiel que había venido a ayudarme, me desperté agonizando, los inhaladores ya no me hacían efecto. Con lágrimas en los ojos, casi sin aliento, me despedí de Massiel. Me invadió una gran tristeza por tener que abandonarlas, a Massiel, a Chantal y a Sombra. Estaba una vez más preparado para irme, sin ningún miedo, aceptando mi destino sin querer entender nada. Massiel, en una actitud de impotencia, me abrazó profúndame y me dijo, pero dijiste que abriríamos otros centros en China, India y Vermont, Estados Unidos.
A raíz de mis prácticas en silencio, de mi aislamiento, hoy sigo aquí mejor que nunca. Mis defensas se han fortalecido aún más para los tiempos venideros. A mis casi 59 años no hay montañas que no pueda subir o caminos que recorrer.
Se reconfirma que la medicina moderna es necesaria para aliviar los síntomas y evitar el sufrimiento del cuerpo-mente al marcharse, pero sin creer que cura. La sanación solo se manifiesta en conexión con la esencia de uno mismo, liberándose de todo miedo para dar paso la a energía de la existencia.
¡Quién mejor que la energía que nos da la vida, es decir, nuestras esencias, puede cuidar de nosotros¡. (Video Meditación trascendental de sanación)
Ya muchas personas preparadas han venido a sanarse de países europeos, y de países muy lejanos como Nueva Zelanda y Australia. Con todas ellas comparto mi vida por no poseer nada más que lo que soy. Y lo que soy hoy no tiene nada que ver con lo que era ayer, con lo que estudié o con las experiencias que adquirí en el pasado. Todos ellos se marchan manteniendo un secreto que difícilmente se podría explicar racionalmente.
La sociedad camina sin sentido hacia el gran muro final.
La espiritualidad conocida, laica o no, camina en bucle desde hace siglos, desde la buena intención.
La conexión con el corazón, es caminar en línea recta en pleno equilibrio y unión con uno mismo y con el todo. Unión verdadera cuerpo-mente-esencias.
No es un escrito con fines comerciales para intentar convencer y ganar “clientes”. Es solo que siento la necesidad de comunicar la experiencia y conocimiento que no me pertenece por el bien común y algo más.
Para venir al Valle hay que estar preparado. El dinero no abre la puerta de mi corazón. La sinceridad, la honradez, la búsqueda de la integridad, y el amor trascendental (energía de unión), son las llaves de mi corazón.
Estoy preparado para divulgar a los cuatro vientos el conocimiento transcendental universal que nos pertenece a todos.
♥︎ Espero que conectéis con vuestras intenciones trascendentales, ya que ellas sois.
♥︎ No tengáis miedo a nada, ya que no hay nada que temer.
♥︎ Más allá de la vida, está la energía que da la vida. Conectad con ella (vuestras esencias).
♥︎ Siempre estaré en el silencio de vuestro corazón.
Mis palabras no pueden ser entendidas, solo sentidas.
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Massiel y Chantal han puesto sus voces en mis notas de autor.Playlist Español.
¡Gracias!
Un abrazo trascendental,
Alain Tello Robledo
